Una entrada que te hice

Ahora que he perdido todo y no me queda nada mas, ahora que tu te has ido y no paro de llorar, puedo tener amigos y amigas pero en el amor que sentía no se remplazará por nada, porque a veces cuando estaba a tu lado podía volar y no paro de mirar tus fotos, aunque eso me haga llorar, porque aun te amo. Te llevo en el corazón y llevo razón cuando digo que te llevaré al cielo, y escribo todo esto porque mi corazón lo pide. No lo soporto, aunque viendo que te fuiste y ahora ya esta otro, a veces me despierto por las noches, solos, oscuro, con miedo pero pensando que tú solo fuiste un sueño. Por favor, dime que esto no es cierto, en mi último partido soñé que venias a verme, sé que odiabas que jugara por el tema de la rodilla, pero el fútbol me hace liberarme. Cada letra de esta entrada es una lagrima imaginando empezar de cero, pero sé que eso es imposible. Desde que te fuiste, Francisco Javier Garcés Morales no ha vuelto a ser el mismo. Es que yo echo de menos tus abrazos, tus besos, tus caricias, no mientas porque tu también los echas de menos. Nunca imaginé un final así, me da miedo seguir esta entrada, porque cada letra que escribo es una puta lágrima, y solo pienso que esto ya ha acabado, que nunca volverá a ser como antes, pero, que sepas que esté quien esté, yo te esperaré. Como ya te dije, no tienes un hueco en mi corazón, es para ti entero y sé que nadie TE VA A AMAR COMO YO TE HE AMADO, NADIE. 
Adios...